Constituye la expresión del alma que canta al Creador, por su grandeza, por la salvación, por la vida que tenemos en Cristo, y por la esperanza de irnos con el Señor más allá del sol.



Hay muchos motivos para alabar a Dios, realmente toda la vida debemos alabarle al Señor, escalando peldaños de la adoración a Su Santo Nombre. El índice alfabético de los coros, fácilmente nos ayuda para identificar cada texto, y seguir la melodía comúnmente conocida.



El presente himnario es el segundo tomo de coros evangélicos, compilado por el Rev. Carmelo Ruperto, quien por años viene deleitando a miles de nuestros hermanos que con espíritu alegre bendicen al Señor en todo tiempo y la alabanza a Él está de continuo en su boca.