EL TRIUNFO DE LA CRUZ EN TIMES SQUARE, es un libro que presenta, en cuerpo entero, la victoria continua y permanente de la Cruz, por parte de una iglesia que se levantó hace cincuenta años, en el mismo corazón de Nueva York. En medio de luchas y ataques del enemigo, la iglesia ha prevalecido contra viento y marea, levantando muy en alto el indiscutible y único emblema de nuestra fe.



La historia de la Iglesia Cristiana El Calvario está estrechamente ligada a la impecable trayectoria ministerial de sus fundadores, el reverendo Antonio Hernández y su esposa Josephine. Se reconocen en el reverendo Hernández sus cualidades de plantador de iglesias y de magnífico gerente de su organización, el Concilio Asamblea de Iglesias Cristianas, Inc. (AIC) del que fue por varios años su obispo y uno de sus más ilustres presidentes. También se incluyen las verdades fundamentales sobre las doctrinas y prácticas que sigue la iglesia. Asimismo, se presenta una sustentación bíblica sobre algunas cuestiones de actualidad que la congregación respalda y defiende.



A continuación se narran las distintas etapas por las que pasó la congregación, que va desde el parecido que los locales del templo tenían con las cajas de fósforos en los años de su peregrinaje de un lugar a otro, hasta el sólido templo que se levantó de la calle 56. Más adelante, se cubre detalladamente, la bendecida etapa de la iglesia que experimentó en su propiedad de la calle 47, con sus testimonios y grandes realizaciones que Dios hizo en casi tres décadas allí.



Un capítulo especial está dedicado a la trayectoria ministerial del Rev. Héctor M. Vega y su esposa Ruth, quienes por voluntad divina asumieron la conducción de la iglesia en agosto de 1978, y que al presente, son ejemplos ante propios y extraños de un efectivo y constante trabajo pastoral y ministerio múltiple.



El Triunfo de la Cruz en Times Square en su recta final, se refiere a la organización de la iglesia, los ministerios y la dinámica de su trabajo Uno de los logros indiscutibles de la iglesia es el fruto de las misiones, al haber salido de las entrañas de El Calvario, muchos hijos que han abierto un sin número de congregaciones y ministerios en diferentes lugares de los Estados Unidos y otros países.